Puñales por la espalda: El misterio de Glass Onion

 

El éxito de Puñales por la espalda, estrenada en 2019, hacía casi inevitable que la película detectivesca tuviera una segunda parte y, en efecto, el año pasado llegó Puñales por la espalda: El misterio de Glass Onion, que puede verse en Netflix. Es posible que la historia de esta secuela no sea tan redonda como la de la primera parte, pero mantiene en buena medida su esencia. Es una película divertidísima que vuelve a hacernos sospechar de todos los personajes, a cuál más extravagante, con giros de guión constantes y una espectacular resolución del caso.

El único personaje que repite de la primera parte es el del investigador Benoit Blanc (Daniel Craig). El conocido como el mejor detective del mundo está bastante muerto del asco en 2020, durante el confinamiento provocado por la pandemia. De pronto, recibe la invitación de Miles Bron (Edward Norton), un millonario creído y visionario creador de una empresa tecnológica muy disruptiva. Este tipo invita a sus amigos más cercanos a su isla privada en Grecia para disfrutar durante el fin de semana. El detective no conocía en persona al multimillonario, pero ahí está, junto a una política, un científico, una modelo reconvertida a empresaria, un YouTuber y demás personajes que orbitan en torno al ricachón, amigo y, sobre todo, mecenas de todos ellos.

Naturalmente, como mandan los cánones del género, nada es lo que parece y todos tienen motivos para matar a alguien en esa isla. Además, el millonario ha decidido dar libre el fin de semana a los 50 empleados que mantienen a punto su mansión en esa isla privada, salvo un tipo misterioso que anda por ahí sin saber muy bien de dónde ha salido. Poco a poco iremos conociendo las historias de los distintos personajes, qué les ha llevado hasta allí y cuál es la relación entre ellos. La película, ya digo, es muy divertida. Para empezar, por lo peculiar de los personajes. También por el escenario casi futurista que supone esa mansión del excéntrico millonario que todo lo resuelve con dinero. Surgen rencillas, malos rollos, problemas, enfrentamientos, divisiones... 

No es una película convencional, con un asesinato al comienzo del filme que debe ser investigado. Es más original, da muchas más vueltas. En definitiva, Rian Johnson consigue algo así como empezar una saga haciendo que su segunda película rime con la primera, pero aportando las suficientes novedades como para que no suene a una fórmula repetida. Muy entretenida.

Comentarios