La Casa de Papel: De Tokio a Berlín

 

Coincidiendo con el estreno de los capítulos finales de la serie, Netflix compartió también un documental, La Casa de Papel: De Tokio a Berlín, de dos partes, en las que distintas personas del equipo de la serie hablan de su temporada final y de cómo lidian con el hecho de que su trabajo se haya convertido en un fenómeno mundial. Resulta muy interesante porque, más allá de alimentar aún más el fenómeno fan, explican los objetivos de sus creadores de cara al desenlace de la historia y la forma en la que se rodó


Por ejemplo, los guionistas y productores ejecutivos de la serie explican el reto que supuso para todo el equipo convertir la primera parte de la quinta temporada en una historia puramente bélica. Se cuenta que quieren que todo fuera real, de tal forma que destrozaron en una única toma, la de la gran explosión, un decorado que había costado mucho y que estaba cuidado al detalle. Los actores también relatan lo cansado que les resulta rodar durante horas las mismas escenas de explosiones, disparos y "ensalada de tiros". 

Este documental ayuda a valorar aún más el impresionante trabajo que hay detrás de la serie, que cuida cada detalle. Es especialmente interesante ver cómo los actores preparan sus interpretaciones y cómo en algunos casos, parece atisbarse un cierto parecido entre los personajes y los actores que les dan vida. Por ejemplo, Álvaro Morte, el profesor, se presenta como alguien metódico y serio, como su propio personaje, mientras que Najwa Nimri parece aportarle a la inspectora Sierra un lado más caótico e impulsivo. Pedro Alonso (Berlín) se prepara pintando lo que le ocurre a su personaje esa temporada. 

En las entrevistas a los actores y miembros del equipo de la serie se aprecia la responsabilidad que todos sienten ante la grandeza adquirida por la serie, la más vista en Netflix en todo el mundo, un auténtico fenómeno. Los guionistas confiesan que cuando se empezó a rodar esta temporada final no sabían todavía cuál sería el final, revelación un tanto sorprendente, sobre todo, por lo bien resuelto que está. De Tokio a Berlín es, en fin, un documental recomendable para aquellos que han seguido la adictiva (aunque no siempre verosímil) historia de La Casa de Papel

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