Alicia Moreno se marcha del Ayuntamiento

La salida de Alberto Ruiz Gallardón del Ayuntamiento Madrid hacia el Ministerio de Justicia ha provocado un terremoto en la política de la capital que ha dejado a Ana Botella con el bastón de mando. Todavía me queda pendiente escribir más a fondo de este cambio en la alcaldía, pero hoy quiero hablar de otra salida que ha estado motivada por la de Gallardón: la de Alicia Moreno Espert. Esta barcelonesa llegó a la política de la mano del hoy ministro de Justicia y se marcha de ella con él en un ejercicio de lealtad poco habitual en política. Además de eso, Alicia Moreno ha ejercido de forma ejemplar y eficiente su labor al frente del área de cultura del Ayuntamiento. Llevaba tiempo queriendo escribir de ella más a fondo y me da cierta rabia que tenga que llegar ese artículo motivado por su salida del Consistorio.


Alicia Moreno dice en un comunicado que sus doce años de actividad política han sido "un auténtico privilegio". Como madrileño creo que alguien debe escribir que el placer ha sido nuestro al ver la explosión cultural que ha dado Madrid con ella al frente del Área de las Artes. Alicia Moreno siempre ha sido independiente y era la única persona del equipo de Gallardón sin carné del partido. De hecho, era delegada de la Artes, no concejala. Su labor ha sido magnífica y es de justicia reconocerlo. Ha recibido críticas porque pocas actitudes garantizan más críticas que la genialidad y la brillantez. Habrá a quien le cueste reconocer que su paso por el Ayuntamiento de Madrid ha sido una excelente noticia para la cultura de la capital. Se va dejando espacios como el Matadero, el reformado Conde Duque, festivales destacadísimos en sus ámbitos, eventos grandiosos como la Noche en Blanco y, esto es muy importante, un concepto, una forma de entender la labor política y cultural que dejará huella. En ese mismo comunicado, Alicia Moreno dice que su labor al frente del Área de las Artes fue un modelo ideado por ella y por el ex alcalde Gallardón. A los dos, pues, les debemos estos exitosos avances.


Ella fue mucho más que una política, porque en realidad nunca fue ni quiso ser tal cosa. Es el vivo ejemplo de acierto en la gestión y también de innegable valía profesional. Ella era alguien en su campo antes de llegar a la gestión pública. Con muchos otros responsables políticos pasa al revés, primero llegan a un gobierno, labor que les viene grande, y luego encuentran acomodo en empresas privadas. Ella no. Ella ha dado mucho más a la política de lo que la política le ha dado y ella, a diferencia de tantos, no necesitaría presumir de acta de concejal para encontrae trabajo. Su magnífica labor profesional es suficiente carta de presentación. Antes de unirse a Gallardón para entrar en política ella ya había tenido responsabilidad en cuestiones culturales y lo que ha hecho estos años es poner su experiencia y sabiduría, su gran talento, al servicio de Madrid y de los madrileños. Acostumbrados como estamos a que para formar parte de un gobierno resulte mucho más necesario tener el carné del partido y ser alguien sectario y acrítico, Alicia Moreno es todo lo contrario. Es una mujer independiente que tan sólo hacía bien su trabajo.


Se marcha contenta tras su paso por la política. Estas líneas son mi reconocimiento a su labor y mi agradecimiento. Alberto Ruz Gallardón ha hecho muchas cosas bien en Madrid y ha transformado la ciudad, le pese a quien le pese, pero como esto puede ser interpretado como un comentario político y no lo es, no incidiré más en ello. La labor de Alicia Moreno ha sido excelente. Como digo ha recibido críticas y estoy seguro de habrá cometido errores, pero ella es la gran responsable de que desde el Ayuntamiento de Madrid se haya revitalizado la vida cultural de Madrid. Considero que una de las mejores cosas que se puede decir de alguien que ejerce responsabilidades políticas es que su paso por el cargo ha supuesto un antes y un después positivo. Es el caso de Alicia Moreno. Ella ha traido una mentalidad muy acertada y necesaria a la gestión cultural de Madrid. Algo que se le ha echado en cara es que ha dejado algo de lado a los distritos. Esto es algo más profundo, pero sí es cierto que el Ayuntamiento de Madrid se olvida con demasiada frecuencia de que la ciudad no se reduce a los distritos del centro. De todos modos, la valoración de su gestión no puede ser más positiva.


La Noche en Blanco no se celebró el año pasado por la crisis, pero es una cita ineludible ya para la cultura madrileña. Madrid es una ciudad abierta, cultural, viva, llena de espectáculos y de buen ambiente. Lo es desde hace mucho y gran parte del mérito es de sus ciudadanos y los empresarios de este campo, pero desde el Ayuntamiento estos últimos años se ha potenciado esa imagen. Es algo que debemos agradecer. Alicia Moreno ha llevado la magia a las calles de Madrid en muchos espectáculos sensacionales, ha puesto su toque magistral en muchas celebraciones y ha dado un impulso excepcional a la vida cultural de la ciudad. Se va del Ayuntamiento una mujer independiente (algo que ella dice que no mola nada porque ni los tuyos se fian de ti al no tener carné del partido) que ha ejercido su labor con maestría.


Desde el punto de vista cultural, su paso por el Ayuntamiento ha sido todo un acontecimiento para Madrid. Desde el punto de vista político, su forma de actuar y su gran capacidad es ejemplar y poco frecuente. Ella, reitero, no es el tipo de persona que se dedica a la política a la que realmente le costaría horrores progresar en la empresa privada sin el empujoncito de sus padrinos políticos. Alicia Moreno ha sido responsable, eficiente y ha servido a los madrileños en lugar de servirse de ellos. Ha transformado la vida cultural de la ciudad y me apetecía escribir que su labor no será olvidada y que deberá ser respetada y continuada con el nuevo equipo. Gracias.

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