Hoy se cierra el VI Congreso del Partico Comunista de Cuba (PCC) y Raúl Castro ha anunciado alguna novedad estos días. ¿Síntomas de apertura? Habría mucho que decir sobre eso. Más bien creo que todo lo que está haciendo el partido único cubano es una huida hacia adelante. Ahora que vivimos revoluciones en muchas zonas del mundo, más les vale a los anticuados y ancianos líderdes del PCC hacer ver que están dispuestos a hacer algún tipo de cambio, aunque sólo sea de cara a la galería. Lo cierto es que Cuba no es, nunca lo fue, ese paraíso del comunismo. A algunos les puede costar reconocerlo, pero Cuba no es ni más ni menos que una dictadura, y las dictaduras no son ni de izquierdas ni de derechas. Todas tienen las mismas caracterísitas, es decir, partido único, presos políticos, falta de libertad para sus ciudadanos y un nivel de vida más que mejorable para el pueblo. En definitiva, un régimen autoritario imposible de defender bao ningún concepto. Llama mucho la atención que aún haya quien defienda el régimen de los Castro en Occidente. Hay personas que todavía se creen eso de que el comunismo en la isla es algo así como una maravillosa excepción mundial. En algo tienen razón, es una excepción mundial porque, afortunadamente, no hay muchas dictaduras en el mundo.
Parto pues de esta opinión sobre el régimen de los Castro. Nadie puede convencerme de que en Cuba hay una situación que en verdad se aleja mucho de la realidad. No soy un gran conocedor de la realidad cubana, pero me sorprende muy negativamente que haya personas que puedan elogiar un régimen dictatorial. Puede que Fidel Castro fuera en su día un símbolo. Desde luego que lo fue para toda la zona y también en todo el mundo, pero lo cierto es que ha terminado siendo un dictadorzuelo del tres al cuarto. Ésa es la realidad, al menos así lo veo yo. Puede que no esté en lo cierto, pero nadie podrá rebatir que en Cuba hay un partido único, que hay presos políticos, etc. Y mientras todo eso pasa, ¿cómo viven sus ciudadanos? ¿cómo les está afectando la crisis mundial? Pues echo en falta reportajes a fondo, ahora que los mandamases del PCC se rúenen en el Congreso, sobre la vida de los cubanos. Pero los propios dirigentes cubanos, al etar dispuestos a hacer cambios en su política económica terminan por dar la razón a los que defienden que el modelo de la isla es insostenible. Son varias las medidas económicas que se están debatiendo estos días en el Congreso del PCC. Habrá que esperar para ver qué sucede finalmente.
Por cierto, la propaganda del régimen cubano recuerda a todo el mundo que las medidas que se están debatiendo han pasado antes por las manos de los ciudadanos. Así, a falta de elecciones libres y de partidos políticos que sean una alternativa real al partido único, creen que son un referente de la libertad y de la participación ciudadana por haber consultado las medidas previamente con asambleas ciudadanas. ¿Quié controla estas asambleas? ¿Acaso no van a decidir lo que quieran sin tener en cuenta lo que hayan dicho los cubanos? ¿Pretenden hacernos creer que se escucha realmente al pueblo? Quien se lo quiera creer y pensar que ese modelo es maravilloso, allá él. Yo no querría para mí un régimen dictatorial en el que se hace una pantomima de participación ciudadana y a la vez se encarcela a los opositores a los mandatarios. Yo prefiero vivir en una democracia. Y sí, la democracia en la que vivo tiene sus grandes problemas, y puede que se tenga mucho que mejorar, pero los ciudadanos votamos y podemos expresar libremente nuestra opinión sin tener miedo a las represasalias de los líderes del partido. No faltará quien se quede prendado de este modelo de asambleas populares, pero yo no veo en ellas nada digno de admiración, ni nada que supere a una democracia.
La dictadura cubana tiene al frente a personas muy mayores y que llevan mucho tiempo en el poder. Ahora el presidente cubano, Raúl Castro, ha dicho que eso de perpetuarse en el poder se va a acabar y que, como mucho, los altos cargos podrán estar diez años en altas responsabilidades. Diez años. Es quizás lo más novedoso de lo que ha dicho el presidente cubano estos días en el VI Congreso del PCC. Si esto es lo más novedoso, lo más destacado sería que se dieran pasos reales hacia un cambio en el modelo económico de la isla. Pero claro, el señor Raúl Castro viene ahora a hablar de renovación, él, que ha sido puesto a dedo donde está por el líder supremo y que no ha recibido el apoyo ni la legitimación de los ciudadanos. Quiere renovar el partido y también el sistema económico en Cuba. Nada ha dicho, por el momento, de la libertad de los cubanos, de reformas que avancen hacia una democracia o algo que se acerque a ello. De momento él sólo dice que la economía se debe reformar, veremos en qué puntos y cómo se lleva adelante estos cambios, y también que habrá que modificar algo en el Partido Comunista. Así, los altos cargos verán limitado a diez años su tiempo en el poder. Parece poco cambio y no mucha renovación.
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