Las noticias que más preocupan a todo siguen siendo las que llegan desde Libia, pero hoy hablaré de algunas informaciones nacionales que también son muy interesantes. Hoy, sin ir más lejos, hemos recibido una extraordinaria notica: cuatro miembros de ETA han sido detenidos en Vizcaya. Es una gran noticia, porque todo lo que suponga demostrar a los terroristas que la postura del Estado de Derecho no ha cambiado, ni puede cambiar de hecho, porque ahora los asesinos digan que están en tregua. La Policía y la Guardia Civil no pueden estar de tregua con los criminales, y por ello siempre es positivo que se lleve a los etarras al lugar donde deben estar: la cárcel. Los detenidos tenían 200 kilos de explosivos, hecho que para el vicepresidente Rubalcaba significa que "ETA no ha dejado la violencia". El ministro del Interior también ha aprovechado para lanzar a los terroristas el mensaje de que el Estado de Derecho no se detiene ante los anuncios de la banda criminal. Las operaciones contra ETA siguen adelante y esta es la mejor muestra de que el gobierno continúa firme en su posición de tratar de atacar a la banda en todo momento. Por ello debemos felicitarnos hoy todos los demócratas. No se puede cambiar la postura ante ETA. Son unos criminales que tienen que ir a prisión.
En relación al entorno de la banda, la atención política también está centrada en la presencia de Batasuna en las próximas elecciones bajo las siglas de Sortu. Hace un tiempo se presentó este partido y la situación actual de esta formación pasa por el estudio de la justicia de sus estatutos, para comprobar si se cumple o no con las condiciones de la Ley de Partidos. Está por ver lo que decidan los tribunales, pero las víctimas del terrorismo creen que al final el partido será legalizado, al menos eso temen. Es por ello que, de forma preventiva, han convocado una manifestación para exigir al gobierno que se ilegalice este nuevo partido. El lehendakari, Patxi López, declaró hace pocos días que esta manifestación era de carácter preventivo y que no es al gobierno, sino a la justicia, a la que le toca decidir si Sortu puede o no presentarse a las próximas elecciones. Considero que las víctimas del terrorismo merecen el máximo respeto, pero ellas también se pueden equivocar y ellas también pueden politizarse. Y creo que es un error convocar una manifestación, ojo no contra una decisión que ya se ha tomado, sino contra lo que ellos temen que puede suceder. Las víctimas siempre contarán con el respeto y el apoyo de toda la sociedad, pero creo que su marcha no tiene mucho sentido, pues aún no sabemos si Sortu podrá o no estar en las elecciones.
En otro orden de cosas, y siguiendo con el repaso a noticias de España que están copando los titulares de la prensa estos días, la polémica está servida con la medida del gobierno para ahorrar energía de reducir la velocidad en las autovías a 110 kilómetros por hora. Hasta Fernando Alonso ha opinado sobre esta cuestión. Alguien puede pensar que al piloto de la Fórmula 1 nadie le ha dado vela en este entierro, pero hay dos razones por las que considero que esto no es así. La primera, y más elemental, es que Alonso es libre, como todo el mundo, de expresar sus opiniones y si es preguntado por esta medida, ¿por qué no va a opinar? La segunda se refiere a que a los pilotos se les utiliza muchas veces en campañas sobre seguridad vial y demás, es decir, son los propios políticos los que tiran de ellos para sus campañas, por lo que no es tan raro que Alonso opine sobre esta cuestión. El piloto asturiano dijo que era difícil no dormirse a esa velocidad. Las palabras de Alonso vienen a demostrar que en España gusta pisarle al acelerador. Y si antes decía que el piloto puede opinare libremente, también he de decir que no parece muy responsable decir esto. Y no lo parece porque de 110 a 120 tampoco hay tanta diferencia y nadie se duerme a 120, y porque, como ha respondido Rubalcaba, en otros países que tienen el límite a 110 nadie se duerme.
En todo caso, la intervención de Alonso no es más que el lado anecdótico de esta polémica. Lo más importante es que se pretenden ahorrar energía. A esta medida se le ha criticado por muchos aspectos de la misma. En primer lugar, hay gente que cree que este gobierno tiene una afición desmedida por prohibir cosas. La reducción de la velocidad sería un argumento más para apoyar esta tesis. Desde mi punto de vista no es esta la cuestión. Otros critican que los datos que se han dado de ahorro energético no responden a la realidad. En este tema ya hay más miga, y no soy un experto para decir si el gobierno está en lo cierto o no en relación a los datos que ha dado. Las críticas llegan también por otros aspectos. Lo cierto es que no ha sentado bien esta medida. Yo creo que es una medidda temporal, como ha dicho el gobierno, y que tampoco es tan grave ni ha nadie le va a dar un ataque por tener que ir a 110 en lugar de a 120. Si la medida sirve para ahorrar ante la situación actual de la crisis en Libia, no veo por qué hay que poner el grito en el cielo. Otra cosa es que esta medida sea la mejor posible o que se vaya a ahorrar tanto como dice el gobierno. No es ningún drama ir algo más lento en carretera. Entre otras ventajas hay una esencial: se salvan vidas.
En otro orden de cosas, el presidente del gobienro está en Qatar, donde ha sacado importantes apoyos económicos. Según parece la inversión será importante. Allí donde el dinero parece sobrar ha ido el presidente Zapatero a pedir apoyo para la economía española. Desde allí el presidente dijo que la recuperación de la economía en nuestro país va hacia delante. Esperemos que así sea, pero son ya muchas veces las que hemos oído hablar de brotes verdes o de otros anunciones de recuperación que luego no han existido realmente. La recuperación pasa porque el paro deje de crecer. La mala marcha de la economía de nuestro país tiene su peor cara en las cifras del paro. Precisamente porque detrás de esas cifras hay personas que están pasándolo muy mal porque no tiene trabajo ni ningún tipo de ingreso para hacer frente a las necesidades más elementales. No sé si es del todo correcto aceptar dinero de un país que no respeta los Derechos Humanos como es Qatar. Ya surgió un debate similar cuando el F.C. Barcelona aceptó el patrocinio millonario de su camiseta, o también cuando se dio el Mundial de 2022 a este país y se habló, entre otras cosas, del trato a los homsexuales en este lugar. El dinero manda sobre otras consideraciones de carácter ético. Por desgracia.
Otro tema que es noticia hoy, y sigo haciendo un popurrí de muchas informaciones que poco tienen que ver entre sí, es la reelección de Rouco Varela como presidente de la Conferencia Episcopal. El arzobispo de Madrid seguirá al frente de la más importante institución de la Iglesia en España. Rouco Varela ha hablado estos días de diferentes cuestiones en la cumbre de obispos. Entre ellas, ha puesto en muy mal lugar a Internet en general y a las redes sociales en particular y también ha dicho que no cree que exista una mala valoración de la Iglesia en la sociedad actual. Sobre el tema de Internet, el presidente de la Conferencia Episcopal considera que este medio está fomentando la cultura del "todo vale". Yo creo que habrá de todo, y así como no sería justo generalizar sobre la Iglesia por algunos de los graves errores y delitos que cometen algunos de sus miembros, tampoco parece del todo correcto decir que Internet y las redes sociales son, de por sí, unas herramientas poco menos que malignas. Al final la imagen que se da, y de la que la Iglesia no se va a sacudir con este tipo de interevenciones, es que la Iglesia no está al día en casi nada y que no se adapta a los cambos sociales. Lo de Internet no es relevante, pero quizás es una muestra de esta realidad.
Por último, volviendo a lo estrictamnete político, ayer se asistió en Mallorca a la disolución de un partido político ahogado por la corrupción. Se trata de Unión Mallorquina (UM), una formación que es clave siempre en las elecciones en Baleares y que ha tenido que cambiar de nombre para intentar que los votantes no le asocíen con los múltiples casos de corrupción que salpica a esta formación. Es el punto culminante de un proceso en el que se iba enfangando poco a poco y cada día un poco más este partido. O eso pretenden los dirigentes de la nueva formación. Hacer borrón y cuenta nueva para tratar de seguir siendo decisivos en las elecciones autonómicas de mayo, como de costumbre. La corrupción afecta a todos los partidos políticos con responsabilidad de gobierno en España. Quizás por eso la clase política es considera como uno de los principales problemas para los españoles cada encuesta del CIS que pregunta por lo que más preocupa a la sociedad de este país. Debería existir un mayor compromiso de todos los partidos contra esta lacra. Pero la realidad muestra cómo un presidente autonómico procesado (Francismo Camps) repetirá como candidato de su partido a las próximas elecciones. Es un cuento chino eso de que se lucha contra la corrupción en los partidos. Sólo cuando se cree que puede afectar a las espectativas electorales.
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