Los aficionados al ciclismo estamos pendientes cada día de leer la prensa para comprobar si hay alguna novedad sobre el delicado asunto del posible positivo por clembuterol de Alberto Contador el pasado Tour de Francia. El próximo martes se presenta la próxima edición de la carrera y el entorno del corredor ya ha dicho que Contador no asistirá al acto. Sería recomendable que el pasado campeón del Tour, título que posee todavía el español y que esperamos siga siendo suyo tras este proceso, estuviera presente en el acto de presentación del recorrido de la próxima edición, mas no parece que vaya a ser así. La UCI prometió cierta celeridad con el asunto Contador, pero no está actuando con rapidez. Esperemos que al menos lo haga con eficicacia y no castiguen a un inocente.
Si escribo esta entrada no es para decir que no hay nada que decir sobre este asunto, y tampoco para reafirmar (aunque lo hago nuevamente) mi apoyo al ciclista español, sino que escribo porque hay alguna información en las últimas horas que no quería dejar de recoger en el blog. Informaciones que pueden significar algo, o que pueden no significar absolutamente nada, pero noticias y declaraciones que me llevan a ser menos optimista que lo era hace algunos días. Por un lado las autoridades han dicho que no se puede hablar de autotransfusión (¿qué dirá ahora The New York Times?), pero también que no se creen la teoría del filete contaminado.
El presidente de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) declaró ayer que "Contador deberá demostrar su inocencia ante los jueces". Es un despropósito que sea el ciclista el que tenga que demostrar que es inocente, en vez de ellos los que tengan que demostrar que es culpable. Es el mundo al revés que rige desde hace tiempo en el ciclismo. Se han tragado los corredores varios sapos en los últimos tiempos para tratar de ayudar a limpiar la imagen de este deporte. Han aceptado que se les tenga controlados todos los días del año a todas horas, se les ha criminalizado y nadie ha dicho ni mu. La barbaridad que declaró ayer el señor David Howman, me sorprendería de no estar ya acostumbrado a que sean los ciclistas los que tengan que demostrar que no se han dopado, porque todos los corredores son para esta gente culpables hasta que no se demuestre lo contrario. Y como te enfilen, vas listo. Es difícil creer en este sistema y si el sistema no es creíble, el deporte sufre un grave daño.
El presidente de la AMA pidió a la UCI que se dé prisa en resolver este asunto,le falto decir que se dé prisa en condenar a este maldito tramposo. En fin, quieren sentencias ejemplarizantes aunque se lleven por delante por una situación ridícula y surrealista al mejor ciclista del momento. Sobre la teoría de la carne contaminada, el presidente de la AMA ha dicho que esta excusa ha sido rechazada ya en un par de casos. Este señor llegó a decir que si la UCI se retrasa mucho en la resolución del caso, algo que tampoco quiere el propio Contador, podrían ir al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS). Precisamente ayer un ex miembro del TAS apoyó a Contaodr diciendo que está seguro que no se dopó con una cantidad tan ínfima del dichoso clembuterol.
Mike Morgan es ese antiguo miembro del TAS que ha apoyado a Alberto Contador. Ha dicho que si lo que un deportista busca es mejorar su rendimiento con esta sustancia, debería tomar una cantidad mucho más elevada y que sería una locura emplearla en esos términos. Además afirmó que debería ser el análisis, el sistema, el que demostrara que el corredor había ingerido la sustancia voluntariamente, y no al revés pues el ciclista se queda en una situación muy difícil. El caso es que estas declaraciones, por muy sensantas que sean, no salen de la boca de ningún responsable deportivo actual. Es más preocupante por lo tanto atender a las palabras del presidente de la AMA quien ha tirado por la borda la argumentación de Contador de que se trata de un caso de intoxicación alimentaria.
Alberto Contador no va a asistir a la ceremonia de presentación del Tour de Francia si no hay una resolución a su caso antes del martes de la semana próxima que es el día de este acto. Y no se sabe si habrá o no alguna novedad antes de ese día. Confiamos en poder verle en la presentación, sería la primera muestra de que el agua vuelve a su cauce y de que se establece la normalidad. Sería la demostración de que la pesadilla estaría a punto de quedar atrás. Y sería, sobre todo, un acto de justicia para el corredor que tanto está sufriendo.
El corredor está desolado y no entiende nada de lo que está pasando. Aunque lanzó hace poco un mensaje de ánimo que nos hace pensar que va a seguir luchando y que no va a tirar la toalla, Contador se ha planteado dejar la bicicleta, al margen de lo que decida la UCI sobre su caso. El daño que se hace a la imagen del corredor, y el que se hace al propio ciclista que siempre ha apoyado la lucha contra el dopaje es tremendo. Están logrando que, sin haber hecho nada irregular, el mejor corredor del mundo, aunque daría igual que fuera un corredor más discreto, se esté planteando dejar su profesión. Esto demustra hasta qué punto se encuentra desamparado el ciclista. Hasta el punto de plantearse dejarlo todo. Contador debe seguir luchando, el ciclismo y sus aficionados le necesitamos.
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