OT, diversidad lingüística y falsas polémicas

Introducción para no iniciados. Miki, concursante de Operación Triunfo, cantará en la gala del concurso de esta noche Una lluna a l'aigua, de Txarango. Es la primera canción en catalán que se interpretará en las ocho ediciones de este programa. Cuando se repartió el tema, los intolerantes de siempre, quiero pensar que muy minoritarios, pero igualmente ruidosos y molestos, saltaron exaltados. Criticaron que se cantara un tema en catalán, en un programa que interpreta canciones en inglés cada semana. Enseguida los cuatro fanáticos de siempre dejaron clara su ignorancia y dijeron que la inclusión de este tema en OT era un guiño al independentismo, como si sólo los independentistas hablaran catalán, como si cantar en ese idioma, cooficial en el país, fuera una especie de ofensa a los españoles. 


No es nada extraño ni preocupante que se sientan ofendidos por la diversidad lingüística en un programa de televisión cuatro ultranacionalistas españoles que sienten alergia al catalán y a cualquier idioma cooficial español, aunque luego hagan running y vayan a un espacio de coworking sin ningún reparo. Eso entra dentro de lo normal. Suelo decir que lo único imperdonable del independentismo catalán es que le haya dado alas al rancio nacionalismo español, el que tiene una visión estrecha de este país, el que no entiende como una riqueza inmensa la diversidad de lenguas y culturas de este país, el que odia todo lo diferente. Por supuesto, esos fanáticos de este lado, que haberlos haylos, han saltado, muy dolidos. ¡Un tema en catalán en OT! ¿Qué será lo próximo? Hasta ahí, todo más o menos normal. Molesto e incómodo, pero residual. 

Más inquietante resulta que muchos medios, prácticamente todos, hayan incluido noticias sobre este tema en sus web en cuyos titulares no falta la palabra "polémica". Convertir en noticias cuatro tuits de exaltados radicales es bastante discutible, por mucho que dé audiencia. No se puede tomar en serio a quienes de verdad creen que es polémico que se interprete una canción en catalán en un programa de TVE. No sólo porque en ese programa se han cantado temas en inglés o en francés, también en gallego este año. Sino porque esta reacción de cuatro exaltados sólo los retrata a ellos y a su visión estrecha de la realidad, a su fanatismo. Dar alpiste a los fanáticos no parece la mejor idea. Hacerles ver que esa ignorancia suya merece el menor respeto, que tienen alguna razón, que de verdad tienen capacidad de generar una polémica por su intolerancia, es dar publicidad gratuita a su radicalidad. 

La mayoría de las críticas a que se interprete este tema en OT se limitan a decir que es en catalán. No van más allá. Odian ese idioma porque son incapaces de mirar más allá de su sectarismo político. Sin más. Pero alguno de los críticos intenta hacer un argumento más sofisticado y todavía resulta más espantoso. Porque resulta que los miembros Txarango, el  grupo autor del tema, son, al parecer, independentistas. Vaya por dios. ¿Esta gente necesita saber las ideas políticas de cada cantante que siguen antes de decidir si le gustan o no sus canciones? ¿Hay que pedir un carnet de algún partido concreto a los intérpretes antes de que se canten sus canciones? ¿Las legítimas ideas políticas de un autor tienen algo que ver con sus creaciones? 

No tengo claro si estas personas que dicen que no les gusta que se cante este tema porque su autor es independentista necesitan saber a quién votan los cantantes estadounidenses que siguen. O si es sólo que su manía persecutoria y su catalanofobia hablan por ellos en este caso. No sé a quién votan los componentes de Txarango ni me importa. Obviamente, si la mitad de la población de Cataluña vota a partidos independentistas, parece razonable que una parte de los cantantes catalanes sean independentistas. Pero que las ideas políticas de alguien sean decisivas para que gusten o no sus canciones es algo muy marciano. ¿Qué más da? ¿De verdad alguien puede valorar un tema por la afiliación política de quien la ha creado? Esta falsa polémica demuestra por enésima vez que en esta crisis política en Cataluña los radicales y fanáticos no están sólo de un lado. Y que la música debería estar por encima del fanatismo de unos pocos. Ya era hora que en OT se cantara un tema en catalán. Hay donde elegir para próximas canciones en ese idioma: Manel, Buhos, Els Catarres, Els Amics de les Arts... Para la siguiente. 

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