Como saben, el dato que cada mes da el gobierno sobre el paro es el referido a las personas registradas en los servicios públicos de empleo, el antiguo INEM, mientras que la EPA (Encuesta de Población Activa) es un estudio trimestral realizado por el INE que habla sobre las personas que no tienen trabajo, estén o no apuntadas en las listas de las oficinas de empleo. Hecha esta explicación, creo que ya innecesaria porque se conoce bien la diferencia (creo), el dato de paro registrado del mes de abril ha dado un cierto alivio, pues el desempleo cayó en 46.050 personas hasta los 4.989.193.
Es el segundo mejor mes de abril desde 2007, supone dos meses seguidos con caída del paro y la cifra de personas apuntadas en los servicios públicos de empleo para buscar trabajo baja de los cinco millones de personas. Lo dicho, un leve respiro que no podemos dejar de reseñar. Abril suele ser un mes en el que cae el paro. Tan sólo en plena explosión de la crisis económica (2008 y 2009) aumentó la cifra de personas desempleadas en este mes. El año pasado, cayó en 6.632 personas y en 2011 el descenso fue mayor que este año ya que la cifra de personas en paro bajó en 64.309 personas. En la comparación interanual, el paro ha subido desde abril de 2012 en 244.958 personas, un 5,16%.
Buen dato, sin echar las campanas al vuelo para nada, el de la afiliación a la Seguridad Social. En abril creció en 51.077 personas (un 0,32%). De esta forma, la cifra total de ocupados sube hasta los 16.232.352. Por empleos, el paro desciende en todos los sectores menos en el de personas sin empleo anterior con caídas como la del 3,74% en agricultura, el 2,46% en la construcción o el 0,85% en la industria. Sin embargo, en el colectivo sin empleo anterior el paro subió en 3.790 personas (un 1%).
En resumen, abril no ha sido un mal mes para el empleo. Entra dentro de lo esperable en un periodo en el que tradicionalmente aumentan las contrataciones. Con el desolador panorama laboral que sufrimos en España, una cifra como ésta ha de ser siempre bienvenida. Al menos, como un leve respiro, como un cierto alivio, que no es mucho más. Pero para esas 46.050 personas que dejaron las listas de los servicios públicos de empleo porque encontraron un trabajo sin duda sí es más que eso. Una luz al final del tunel para ellos. En cualquier caso, el desempleo sigue siendo insufriblemente alto y los partidos políticos, agentes sociales y empresarios deben anteponer el combate contra esta lacra a cualquier otro interés particular. Se habla estos días de gran pacto de Estado contra el desempleo. Sería una gran noticia, sin duda que, al menos, daría cuenta de que al fin todo el mundo con responsabilidades públicas ha entendido cuál debe ser la absoluta prioridad de la política española en estos momentos.
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