La alarma nuclear en Japón tras el terremoto y posterior tsunami en este país asiático sigue centrando la atención de todo el mundo que mira con horror como las cifras de muertos y desaparecidos siguen creciendo, que continúa asistiendo asustado a las imágenes de la fuerza devastadora de la naturaleza cuando se produjo el seísmo en Japón, y que ha abierto un debate sobre la seguridad de las centrales nucleares con motivo de la peligrosa situación que se está viviendo en este país. Así, son muchos los que aprovechan esta ocasión para dejar claro que la energía nuclear no es tan segura y tiene más riesgos de lo que las autoridades quieren hacernos creer. Hay cierta polémica porque algunas ONG han dicho que estamos ante el peor accidente nuclear tras Chernobil, mientras que las autoridades japonesas se limitaron a decir ayer que había habido alguna pequeña fuga de mínimas cantidades de radiación. En todo caso, el debate y la polémica que se pueda abrir a raíz de lo que está sucediendo en Japón tendrán que esperar porque lo más importante ahora es intentar solucionar el grave problema en las centrales de Fukushima. Una fusión nuclear, que es lo que teme puede estar pasando, sería una tragedia de grandes proporciones y con efectos difícilmente calculables.De momento, las autoridades han evacuado la zona más cercana a las centrales nucleares de esta ciudad. Así, un radio de 20 kilómetros alrededor de las centrales ha sido ya desalojado para evitar el mayor riesgo en caso de que no se pueda lograr estabilizar la situación. La última hora, que leo en los distintos medios de Internet, dice que es "altamente probable" que se haya ininiado una fusión del nucleo en una de esas centrales. Es un escenario trágico y preocupante y tal y como ha reconocido Yukio Edano, secretario jefe del gobierno japonés, se está trabajando ya bajo esa hipótesis. No es nada fácil saber a ciencia cierta qué es lo que está pasando, pero el temor en la población es muy grande según explican estas mismas informaciones, y no es para menos. Después de haber vivido uno de los terremotos más fuertes de todos los tiempos, el más grave de cuantos han sido registrados en Japón, parece lógico que la alarma nuclear lleve a los ciudadanos a no poder respirar tranquilos en absoluto hasta que no se logre poner punto y final a esta emergencia. Este efecto secundario del terremoto es lo que más preocupa ahora mismo, pero las informaciones sobre la central nuclear conviven con otras que hablan de pueblos enteros que están desaparecidos. Terribles noticias que invitan a pensar que el número de víctimas será mayor.
Sobre la polémica que se ha abierto irremediablemente en relación a la energía nuclear, esta alarma en Japón está siendo utilizada por los contrarios a este tipo de energía como un argumento de peso para desacreditarla. Greenpeace está siendo una de las voces más críticas en este debate. Así, sus quejas se centran en tres frentes. El primero de ellos, que ha fallado la seguridad de la central japonesa. El segundo, que no se está contando toda la verdad desde las autoridades de aquel país. Y el tercero, que este accidente provocado por el terremoto no hace sino demostrar que la energía nuclear no es segura y que se debe ir eliminando de forma progresiva. Resulta inevitable que se abra el debate sobre la energía nuclear tras un caso tan grave como éste. Sucede como cuando hay un accidente de avión, que todo el mundo se pone a discutir sobre la seguridad en este medio. En el caso de la energía nuclear, no hay duda que los contrarios a ella van a utilizar, ya lo están haciendo, la situación de Japón para tratar de demostrar que sus argumentos contra ella están justificados. Hay quien piensa que así es, pero también existen opiniones contrarias que defienden que se trata de una situación excepcional y que no se debe emplear el terremoto como argumento contra la energía nuclear.
Tenemos una facilidad enorme para llevar al terreno de la polémica todo cuanto sucede en el mundo. Es por ello que a nadie extraña que en este caso hayamos tardado tan poco en comenzar a debatir sobre la seguridad de la energía nuclear. Antes incluso de que sepamos en qué va a quedar todo, ya estamos discutiendo sobre ello. Lo más importante ahora es estabilizar la situación en las centrales afectadas por el terremoto. Tiempo habrá de ponernos a debatir los distintos enfoques sobre la energía nuclear. De momento lo único que tiene que centrar todos nuestros esfuerzos es intentar ayudar a Japón en lo que necesite. Por un lado está la alarma nuclear, pero tampoco hay que olvidar que este país tiene en estos momentos cientos de personas desaparecidas, y puede que esta cifra se quede muy corta. Cuando se pueda superar esta crisis será razonable que se habrá un debate sobre la enrgía nuclear, pero ahora lo único ue debería ser prioritario, desde mi punto de vista, es tratar de resolver lo mejor posible la situación que afronta Japón, encauzar a este país hacia un lento proceso de recuperación tras esta catástrofe natural. Los desaparecidos y la alarma nuclear son ahora las grandes preocupaciones de este país.
París-Niza. Etapa 7.
Como he ido haciendo desde que comenzó esta carrera, dedico la parte final de la entrada de hoy para hablar de cómo se dieron ayer las cosas en la París-Niza. Fue una etapa muy dura en la que la lluvia hizo acto de presencia con peligrosos descensos. Uno de esos días en los que se demuestra la dureza que tienen que afrontar los ciclistas cada vez que se suben a una bicicleta para afrontar una carrera. El pulso del día se dio entre Kroon, escapado desde muy pronto en la etapa de ayer, y el equipo Movistar. El conjunto español hizo un despliegue formidable que no tuvo recompensan, pero que demostró que estamos habando de un equipo muy serio y solvente. Su trabajo para alcanzar al escapado fue sensacional. Su decidida apuesta por la etapa puso mucho aliciente al día de ayer. Este tipo de actuaciones por parte de un equipo deben ser siempre elogiadas como merecen. En esta ocasión se cruzó por el camino Di Gregorio, el francés de Astaná que atacó cuando Kroon fue alcanzado y al que no pudo coger el pelotón comandado en todo momento por el Movistar. Di Gregorio está haciendo una gran carrera, siendo protagonista en más de un día, y ayer buscó y encontró una victoria de prestigio en esta carrera que toca a su final.
El error de poner tantos puertos lejos de meta quedó subsanado por el circuito final de la etapa de ayer. Un circuito siempre suele poner emoción al final de etapa, más todavía si se trata de un circuito exigente como era el caso. Con subidas y repechos que hicieron las delicias de los espectadores de esta carrera. En meta la victoria final fue para Di Gregorio, y Samuel Sánchez repitió un segundo puesto en la etapa al pasar dando tiempo al grupo a tan sólo cinco segundos del ganador. En ese grupo también llegó Kloden junto al líder, Tony Martin, y Taramae. Tondo se dejó dos segundos con ellos por una caída justo cuando iba a cruzar la línea de meta. Un final triste para el líder del equipo que había puesto toda la carne en el asador durante la etapa, pero hay días en los que la suerte no acompaña y ayer fue uno de ellos para el Movistar. En la genera hubo algún cambio, aunque Martin sigue como líder. Así, el alemán aventaja en 36" a Kloden, en 41" a Wiggins, en 1:10 a Taaramae, en 1:21 a Peraud y en 1:29 a Samuel Sánchez, que está ya sexto y que puede soñar con subor aún más posiciones en la última etapa de hoy con llegada a Niza. Xavier Tondo es noveno y Luis León Sánchez no tuvo ayer su día y ha retrocedido hasta la posición 27.
Hoy se disputa la última etapa de la carrera, la última oportunidad de que la París-Niza de este año no se decida en la crono, sino en montaña. La etapa tiene cinco altos, por lo que aún pueden darse situaciones de gran interés y, por qué no, alguna alternativa a la clasificación general actual. Quizás arrebatar el amarillo a Martin sea muy complicado, pero las plazas del podio pueden cambiar y también se prevé una lucha feroz por la victoria de etapa. Los puertos no están cerca de meta, pero al ser el último día no va más y no hay ya más oportunidades. Se juntarán así las ganas de vencer en una etapa de todos los equipos que aún no lo han hecho, junto a los intentos por subir en la general de todos los que tienen todavía algo que decir, y fuerzas para hacerlo, en esta carrera. La París-Niza ha estado bien, sin llegar a ser una carrera excepcional. La crono ha matado algo el espectáculo, pero no podemos quejarnos porque hemos visto bonitas etapas. Hoy es el día para que confluyan muchos intereses y podamos ver un final de carrera lleno de atractivo y emoción. Por cierto, en la Tirreno Adriático también hay una considerable constelación de estrellas que coparon ayer los primeros puestos en la etapa. Scarponi venció y Gesink es líder.
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