Hoy es fiesta grande en España, o tal debería ser ya que se cumplen años (treinta y dos para ser exactos) de la aprobación de la Constitución española de 1978. Yo soy de los que siempre ha vivido en democracia bajo el marco general de la Carta Magna. Tanto quienes han conocido otro régimen político en España como los que sólo hemos vivido bajo la democracia debemos reconocer el importante papel que ha jugado la Constitución en nuestras vidas. Es un símbolo, entre otras muchas cosas, de la actitud positiva y constructiva de los españoles de entonces que dejaron atrás sus vijas rencillas y todo aquello que les separaba para dotarse de un marco legal que sirviera para todos. Y así se llegó a la Transición española, una época que es referente para todas las transiciones a la democracia en el mundo. Puede que se cometiera algún error, pero es de las mejores cosas que hemos hecho los españoles.
Por lo tanto hoy tiene que ser una fiesta importante. Acostumbrados como estamos a que las fiestas más celebradas tengan más que ver con santos que con hechos de nuestra historia, esta vez celebramos la unión de todos los españoles bajo una misma Constitución. Nuestra Constitución, esa que tenemos que respetar y defender, esa a la que tanto debemos. Confieso desde ya que voy a defender una postura muy favorable a la Constitución, lo digo por si quien lee esto no está a favor, para que sepa que esta es mi visión de los hechos y de la realidad española. La Constitución me sigue pareciendo una herramienta más que válida para regir la vida política española. Creo que es un monumento de la Transición, quizás el más importante de todos. Es el legado que nos dejaron esos grandes hombres que representaron el sentimiento de todo un país. No más enfrentamientos, no más choques, y sí unión y solidaridad entre los distintos pueblos de España.
Yo no viví el momento en el que se aprobó la Carta Magna, por lo que todo lo que sé y lo que puedo contar es fruto de lecturas o de haber hablado con quienes sí lo vivieron. En todo caso está claro que la Constitución provocó recelos entonces en algunos sectores de la sociedad. Pero creo que todos deberán reconocer el destacado papel que ha jugado esta ley de leyes en la Historia de España. Nuestra reciente democracia va de la mano de esta Constitución. Ahora se debate sobre si se debe reformar o no, es posible y no debería exisitir un gran miedo a modificarla si es preciso y si hay un consenso amplio de las fuerzas políticas que nos representan y de todos los españoles. Pero esa es otra cuestión. Hoy es un día para echar la vista atrás y reconocer el camino que hemos recorrido juntos. Los 32 años más positivos, más favorables, con más desarrollo y mejores en toda la Historia de España. 32 años de una democracia joven que entre todos hemos ido construyendo.
Tampoco quiero dibujar aquí un panorama idílico. Es sólo que creo que haciendo balance en verdad son más los elementos positivos que los negativos. Es difícil encontrar un cambio similar al que ha tenido España en las últimas décadas gracias a la reinstauración del régimen democrático. Después de demasiados años de dictadura, ahora podemos vivir en libertad. Todos somos libres de actuar como consideremos oportuno, siempre y cuando no perjudiquemos con ello a los demás, y libres de expresar nuestra opinión. Libres en todos los sentidos. Y gran parte de estas condiciones de libertad se las debemos, como es lógico, a la labor de aquellos padres de la Constitución que hoy deben recibir el homenaje de todos los españoles. Y los españoles debemos homenajear también a todos los compatriotas que votaron por esta Constitución renunciando en ocasiones a algunos de sus ideales como era el caso de todos aquellos que, a pesar de apoyar la república como sistema de gobierno, cedieron y aprobaron esta Constitución.
Hoy habrá un acto en el Congreso de los Diputados al que van a faltar PNV, ERC, ICV, BNG y Nafarroa Bai. La ausencia de algun partido de este tipo en los actos de conmemoración de la Constitución es algo ya que forma parte de la tradición de estos actos. Ellos sabrán cuál es el motivo por el que no acuden. Desde luego no creo que se desluzca lo más mínimo el acto por la no asistencia de representantes de estas formaciones políticas. Lo que desconozco es si esto lo hacen por algún motivo sólido, porque están de puente, o porque les ha dado por ahí. Confío en que ya que faltan lo hagan porque han reflexionado. En todo caso si estos partidos están en el juego democrático es gracias a la Constitución. Si ellos, como el resto, pueden disfrutar de todos los derechos que tenemos los españoles es gracias a la Constitución. Si dentro del sistema democrático pueden expresar libremente sus opiniones es gracias a la Constitución. En fin, no negaré que nunca deja de sorprenderme la ausencia de alguno de estos partidos a los actos del 6 de diciembre. Pero merecen respeto, ellos sabrán sus razones.
Sería muy deseable que en las escuelas se enseñara algo de la Constitución. En verdad es muy poco, que yo recuerde, lo que se habla de la Carta Magna en los colegios e institutos de este país. Quizás haya cambiado, lo que está claro es que en otros países como por ejemplo Francia, los grandes símbolos y elementos de su nación se explican mucho más en las escuelas. Aquí damos el día libre, pero deberíamos no quedarnos ahí y celebrar algún acto también en los colegios (no el seis de diciembre, sino por ejemplo la semana de antes) para que todos sepamos desde pequeños la importancia de la Constitución. Por ello me parece tan bien que estudiantes de colegios e institutos acudieran esta semana pasada al Congreso a leer, junto a actores y deportistas, la Carta Magna. Creo que es una inteligente iniciativa que pretende acercar la Constitución a todos los españoles.
La Carta Magna significó mucho en 1978 y significa mucho en 2010. Es nuestra ley fundamental, es el marco bajo el cual podemos actuar con absoluta libertad e igualdad, con una serie de derechos fundamentales que el Estado español respeta. Entonces fue el paso de un régimen dictatorial a uno democrático. Ahora es una ley de leyes que debemos respetar y cuidar. Una palabra clave hubo entonces y debería estar también ahora en nuestro vocabulario: consenso. El consenso de todos los españoles y de todos los partidos políticos. La unidad es algo muy importante para todo país, también para España. Unidad dentro del reconocimiento de las diferencias entre distintas zonas de España. Diferencias que hacen del nuestro un país plural con distintos idiomas y culturas. Hoy debe ser un día de fiesta para todos porque conmemoramos la Constitución de 1978. Una ley que ha hecho del nuestro un país democrático. Celebremos hoy esta efeméride como se merece.
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