Hitler y París, la historia de una fascinación

 

"Y ahora ha ocurrido: la bandera con la cruz gamada cuelga de la torre Eiffel, las negras tropas de asalto desfilan provocadoras por los Campos Elíseos de Napoleón y, desde lejos, comparto los espasmos de los corazones en los hogares y las miradas humilladas de los antes bonachones burgueses, cuando los botas altas de los conquistadores pisan sus familiares cafés y bistrots. Creo que ninguna desgracia personal me ha afectado, conmocionado y desesperado tanto como la humillación de esta ciudad que, como ninguna otra, había sido agraciada con el don de hacer feliz a todo aquel que se acercara a ella". Así describe Stefan Zweig en el impactante El mundo de ayer lo que sintió al ver a las tropas nazis en París. Recordé este pasaje al ver el documental Hitler y París, historia de una fascinación, de Juliettte Desbois, que es muy recomendable y se puede ver en YouTube, entre otras plataformas. 


Un día de junio de 1940 (según este documental, el 23, pero según otros historiadores, el 28), Hitler visitó París. Un Hitler triunfal, paseando por las calles de la capital francesa, un país que detesta y que ve como un pueblo decadente. Hitler siente aversión por Francia, pero no puede evitar a la vez sentir fascinación por París. La imagen es impactante y estremecedora. El político alemán visita los principales monumentos de la ciudad de la luz. Como relatan los historiadores que participan en este documental, Hitler busca en París inspiración para construir Germania, su proyecto grandilocuente y faraónico, que idea construir en Berlín, lo que implicaría echar abajo la capital alemana. “Cuando la hayamos terminado, París no será más que su sombra”, dijo Hitler. 

El primer monumento que visita es la Ópera Garnier. Hitler, gran aficionado a la ópera, se ve como el Wagner de la política. Sabía de su afición por la música clásica y también por la pintura, pero desconocía que el gran sueño de juventud de Hitler fue convertirse en arquitecto. Tenía pasión por la arquitectura, lo que explica también su proyecto megalómano de Germania y su atracción por París, aunque sintiera repulsión por Francia y por los franceses. 

El documental dibuja el recorrido de Hitler por París en un mapa de la ciudad francesa. Visita la iglesia de la Madeleine, la plaza de la Concordia y el Arco del Triunfo, que le fascinó y que quiso copiar para Berlín. La imagen más icónica de aquella visita fue la que se hizo Hitler ante la Torre Eiffel en el Trocadero. Después visitó Los Inválidos, donde está la tumba de Napoleón, de quien de alguna forma se sentía sucesor. Luego fue a Notre Dame y pasó por delante del Louvre, donde sorprendentemente no se detuvo. El documental cuenta la obsesión de Hitler con El astrónomo, de Vermeer.

Hay otras dos historias de las que relata el documental que impactan especialmente. Para empezar, la forma en la que el París ocupado recibe a los invasores. La bandera nazi ondea de pronto en todos los grandes edificios y por todos lados hay señales en alemán. Los restaurantes se adaptan a los ocupantes y recorren la calle como turistas. También reabren sus puertas los caberts, teatros y cines, con películas en alemán. Varios comercios cuelgan de sus puertas carteles que impiden la entrada de los judíos. 

Termina el documental con la orden que le dio Hitler a Dietrich Von Choltitz cuando se acercaban los aliados: destruir París antes de su entrada en la ciudad. El hijo de este militar alemán que recibió semejante encargo de Hitler habla en el documental. La historia cuenta que Von Choltitz se negó a dinamitar los monumentos de la ciudad en contra de las órdenes de Hitler. En el documental dicen que no fue tanto así: no destruyó París porque no tenía medios suficientes para ello y, sobre todo, porque eso habría supuesto ser juzgado como prisionero de guerra por los aliados. Es una de las muchas historias interesantes que relata este documental impactante sobre el día que Hitler visitó París como un turista. 

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Muy interesante, no conocia la visita de Hitler a Paris.