Hoy vuelvo a escribir sobre una de mis grandes pasiones: el ciclismo. Y la cita más importante del largo calendario de este épico y bello deporte es el Tour de Francia. Llevamos ya tres jornadas de la ronda francesa. En la etapa prólogo la victoria se la llevo Fabian Cancellara. Tony Martin tenía el mejor tiempo y la realización de la televisión francesa nos mostraba un plano muy interesante cada vez que algún corredor ponía en peligro la primera plaza para el alemán, nos mostraba la llegada del corredor que podía batir su tiempo, y la cara de Martin esperando en meta y viendo esa llegada. A Martin solo se le cambió la cara cuando entró Espartaco Cancellara y logró batir por diez segundos su tiempo. En ese prólogo vimos la mejor crono que ha hecho Lance Armstrong desde que volvió a la competición. Contador también estuvo acertado ya que sacó tiempo a todos sus rivales salvo al propio Armstrong que le sacó tan solo cinco segundos. Está claro que Armstrong viene al Tour a disputar la general.
En la primera etapa en línea, que se adjudicó el esprinter Alesandro Petacchi, las verdaderas protagonistas fueron las caídas ya que dos de los principales favoritos para la etapa del lunes, Freire y Cavendish se fueron al suelo. Pero también se cayeron importantes corredores como Alberto Contador. La primera semana del Tour suele ser aquella en la que nadie gana el Tour, pero en la que alguien lo suele perder debido a esta caída. Ayer también hubo caídas de corredores destacados, y otra vez le tocó la china a Contador que se fue al suelo de nuevo. En la misma caída Armstrong y sobre todo Andy Schleck también se cayeron y parecía grave lo del menor de los Schleck, que tenía el brazo pegado al cuerpo y completamente rígido, afortunadamente pudo reestablecerse y entonces se podujo una situación de carrera extraña en la que se decidió parar y no tratar de descartar rivales. Cancellara, el líder y compañero de equipo de Andy, tomó esa decisión y los galones que tiene en el pelotón fueron suficientes para llegar a ese pacto de no agresión que no siempre se ve en el ciclismo. Alberto Contador declaró después que cuando él llegó al pelotón, pues él también quedó cortado, él mismo mandó que se parara el ritmo para que Andy Schleck re reintegrara al grupo de los favoritos. Hoy no habrá tantas contemplaciones.
Lo que sucedió ayer es uno de los grandes debates en el mundo del ciclismo, ¿se debe esperar a los corredores importantes que se han quedado descolgados debido a una caída y no a un corte o a un abanico? Desde luego lo que está claro es que no siempre se actúa de este modo. La duda es si por ejemplo Armstrong hubiera esperado a sus rivales, como muy acertadamente comentó en TVE Pedro Delgado. En todo caso la decisión facilitó, propició de hecho, que Syvian Chavanel ganara la etapa y subiera a lo más alto de la calsificación general. Francia vuelve a tener un maillot amarillo francés.
Hoy se espera batalla de las buenas. Hay siete tramos de pavés, se recorre parte de la París Roubaix, una durísma carrera de resistencia a la que no está ni mucho menos acostumbrados los grandes corredores de este Tour de Francia. Hoy es el primer día en el que tener un buen equipo que te arrope será esencial. Contar con corredores acostumbrados a este tipo de recorridos es importante y puede resultar decisivo a la hora de marcar las primeras diferencias en este Tour de Francia.
El siete veces campeón de la ronda gala ya declaró antes del comienzo de la carrera que esta etapa de hoy iba a ser una carnicería. Desde luego mucho se espera y eso que no son muchos los kilómetros adoquinados. Otro debate que a buen seguro se abrirá hoy entre los aficionados a este gran deporte es si es o no acertado incluir este tipo de trampas, estas superficies adoquinadas en grandes carreras como el Tour. Emoción está claro que va a haber, no recuerdo una tercera etapa en línea del Tour con más expectación que esta del día de hoy en la que los favoritos van a querer estar bien colocados y eso propiciará siuaciones de mucha tensión. A ver qué sucede hoy, mañana hablaré de ello.
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