Las huelgas y las manifestaciones en defensa de la educación pública en Madrid llega hoy a las universidades. Quizás como estudiante de una universidad pública de Madrid que escribe un blog centrado en cuestiones de actualidad debería dedicar toda la entrada a este asunto y a explicar el motivo de la huelga de hoy, pero no creo que mi opinión sobre este tema sea especialmente interesante o representativa. Sólo diré que todo lo que tenga por finalidad defender la enseñanza pública es una buena idea y hay que tenerlo en cuenta. No se debe ver como un gasto más lo que realmente es una inversión de futuro. Otra cosa es que puede que no haya necesidad de hacer la huelga en plena campaña electoral, sobre todo por aquello de que alguien pueda ver intereses políticos en las protestas. De todos modos, si los estudiantes universitarios no se movilizaran para defender la educación pública entonces es cuando me preocuparía de veras. Así, hoy se lleva a cabo una jornada de huelga en las universidades madrileñas para mostrar la oposición de los estudiantes a los recortes en educación. En el caso de las universidades, además, se protesta por la subida de las tasas y por el recorte en la financiación. Sería deseable que la huelga sirviera para mejorar algo las cosas.
Paso ya al asunto al que se refiere el titular de la entrada de hoy. Faltan dos días de campaña y los partidos políticos apuran los últimos actos para lanzar sus mensajes. Básicamente no han variado sus ideas desde que comenzó la campaña. El PSOE, en boca de su candidato, insiste una y otra vez en que "no es lo mismo" que gobiernen ellos o el PP. El mensaje tiene su aquel porque eso es precisamente lo que piensan, por ejemplo, muchas personas del 15-M que proclaman que los dos partidos hacen el mismo tipo de políticas y que hasta juntan sus siglas en PPSOE para decir que tanto monta, monta tanto, Alfredo como Mariano. El PP, por su parte, no deja pasar la ocasión de pronunciar la palabra mágica: confianza. Todo se arreglará con confianza, que va a generar según parece la victoria de Mariano Rajoy, tanto dentro como fuera de España. En cuanto al resto de formaciones, partidos como IU, Equo o UPyD dicen ser la mejor alternativa al bipartidismo, mientras que CC, PNV o CiU intentan ser la mejor opción para defender sus respectivos territorios. La campaña, en fin, ha dejado pocos momentos estelares y pocas sorpresas. No hemos escuchado nada de ningún candidato que nos haya sorprendido de forma considerable. Todo está medido al milímetro.
En España ya no se pueden publicar encuestas, pero sí en el extranjero y, aunque parezca mentira, hay medios internacionales a los que les parece interesar bastante el resultado de las elecciones del próximo domingo en nuestro país. Por ejemplo, el diario británico Times publica hoy una encuesta elaborada por Sigma Dos. Como digo, en España no se puede (está prohibio por ley) publicar, así que nos quedamos con las ganas de comentarlo en este blog, aunque en el mundo globalizado de hoy día cuesta bastante poco acceder a los resultados del sondeo. De todos modos, como ya se está casi echando el cierre a la campaña, y como ya hemos tenido suficientes encuestas en los días precedentes, el interés está centrado en ver y escuchar las últimas propuestas y los últimos actos de cada partido. Hoy el morbo estará en Cataluña, ya que Rubalcaba y Chacón coincidirán en un mitin. A nadie se le escapa que la ministra de Defensa presentará su candidatura a liderar el PSOE si el resultado electoral del partido el 20 de noviembre es malo.
Ayer mismo, quizás para prepararle el terreno a Rubalcaba antes de este acto conjunto de campaña, Chacón defendió que una mujer catalana (como ella) podía liderar perfectamente el PSOE. La ministra, que dio un paso atrás y decidió no presentarse a las primarias para estas elecciones, está esperando su oportunidad y según pasa tiempo parece claro que acertó con su retirada táctica. Como es natural, desde el PSOE se debe defender la idea de que lo que buscará el partido hasta el final es ganar las elecciones, sólo faltaría. Eso no significa que, siendo realistas, muchas mentes pensantes del partido y muchos pesos pesados socialistas no estén planeando ya de algún modo el escenario dentro del PSOE tras las elecciones. El interés de esta cita electoral estará en ver cuán grande es la ventaja del vencedor, pero también residirá en saber si el derrotado será capaz de salvar los muebles y seguir optando a ser secretario general. Dicho mucho más claro, la frontera entre un hundimiento total o un resultado honroso es la frontera entre la despedida de Rubalcaba a todas sus opciones de liderar el PSOE o un cierto refuerzo de las mismas.
Será, por lo tanto, muy interesante ver lo que sucede en el acto de hoy en Cataluña. Lo que va a pasar es que Chacón y Rubalcaba se van a mostrar tan amigos y van a dar la imagen de que los dos reman en la misma dirección pues van el mismo barco. La foto de los dos juntos y las palabras que se puedan dedicar uno a otro pueden cobrar mucho más interés a partir del 21 de noviembre en función de cuáles sean los resultados electorales. Chacón y Rubalcaba son dos activos importantes del PSOE, pero pocos dudan de la rivalidad entre ambos y de que, si todo va como se espera, antes o después se enfrentarán por la secretaría general del PSOE. En este sentido, hay quien expresa que Rubalcaba está recibiendo mucho cariño por parte de los afiliados y simpatizantes socialistas en todos los actos de esta campaña. A su favor tiene el candidato socialista que ha dado la cara en unas elecciones en las que sabía que lo más probable era que se la rompieran. También tiene a favor que da la sensación de que cuenta con el apoyo mayoritario del aparato del partido. Sólo le falta tener de su lado lo más importante: un resultado digno en las elecciones.
Por su parte, Carme Chacón es una cara joven y una política que ha demostrado tener una gran capacidad. Es una ministra bastante bien valorada y su labor al frente de Defensa ha sido correcta. Ella dijo ayer que ser mujer y catalana no debía ser un obstáculo para liderar el PSOE. Espero que así sea. Ser de una región u otra y ser hombre o mujer no debería ser ni un punto a favor ni un punto en contra para las aspiraciones políticas. Eso sí, en el PSOE (supongo que también en otros partidos) el equilibrio entre las federaciones de las diferentes comunidades es siempre complicado y no hay que olvidar que el PSC es, en sentido estricto, un partido independiente del PSOE, aunque está unido a él. De todos modos, las legítimas aspiraciones de Chacón a liderar el partido se pondrán encima de la mesa antes o después.
Mañana comentaré por última vez la campaña electoral. Como el sábado es jornada de reflexión y el domingo estamos llamados a las urnas, las entradas de esos dos días estarán dedicadas a otras cuestiones, que no es que falten precisamente temas de interés estos días. Mañana será el último día en que los partidos políticos podrán pedir el voto. Sería magnífico que todas las personas que acudan a votar el domingo lo hagan porque estén realmente ilusionadas con el proyecto del partido al que van a dar su apoyo, porque están convencidas de sus bondades y de que será lo mejor para España.
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