Esta entrada, al igual que la del domingo, es programada, es decir, está escrita con anterioridad al día en que es publicada. Esto se debe a que no voy a poder entrar en contacto con Internet y el ordenador este fin de semana. Las pocas veces que escribo de este modo, tengo siempre el temor de que pueda surgir una noticia muy importante que deje en mal lugar a estas entradas programadas. En este caso el temor tiene razón de sí, porque hoy se celebra el Comité federal del PSOE. Muchos han señalado este día como el elegido por el presidente del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para despejar la incógnita de su futuro político. Hace unas semanas, varios medios de comunicación como El Mundo, publicaban en portada que hoy, 2 de abril, el presidente del gobierno iba a anunciar que no sería candidato de su partido a las próximas elecciones generales. Cuando esta entrada se publique, estará a punto de comenzar la reunión del PSOE. La expectación es máxima y puede que la noticia salte en este comité. De hecho hay varias posibilidades: que Zapatero siga como hasta ahora, es decir, sin desvelar nada sobre su futuro, que diga que no sigue, que diga que sí... Mil y una alternativas que sólo el presidente del gobierno conoce.
Lo que está claro es que en el seno del PSOE se vive una batalla interna por el poder. Chacón y Rubalcaba estarían en primera línea de salida. La ministra de Defensa quiere ser, eso parece y es legítimo si así fuese, la primera presidenta del gobierno de España. Rubalcaba aspiraría a ocupar el único puesto de máxima responsabilidad que no ha ocupado hasta el momento: el de presidente del gobierno. Son los dos candidatos a candidato de los que más se está hablando. Lo que se dice desde el PSOE, esta semana sin ir más lejos eso afirmó el presidente de Extremadura, Fernández Vara, es que es a Zapatero a quien le correspondo decidir su futuro y manejar los tiempos. Eso sí, el barón socialista también dijo que debe anunciar lo antes posible su decisión y que es posible incluso que ya sea tarde. Otro líder territorial del PSOE, José María Barreda, declaró hace unos días que el ciclo político del presidente del gobierno había acabado. Poco después elogió a Carme Chacón por el mucho futuro que tiene en política. El presidente de Castilla La Mancha se caracteriza por no callarse y decir siempre lo que piensa. Él fue quien dijo hace meses, antes de la última remodelación ministerial, que si no se hacían cambios el PSOE se dirigía a un desastre electoral.
Si a alguien dentro del PSOE le gusta ser protagonista siempre, estar permanentemente bajo los focos, ese es José Bono. Se trata de un político al que yo tengo estima, pero no puedo negar que es una persona a la que le gusta estar siempre en el centro de todas las miradas. Ahí es donde se encuadran las reuniones del presidente del Congreso con todo el que mueve. Se reunió con Zapatero para hablar "de lo que ustedes imaginan" en un par de ocasiones, y ayer fue el turno de José Blanco, el ministro de Fomento cuyas aspiraciones a ser el candidaro parecen haberse frenado en seco. Muchos señalan a Bono como el dirigente socialista que sabe lo que hoy puede pasar en el comité. Para estos analistas, el presidente del Congreso es el líder del PSOE mejor informado, después de Zapatero, en todo este proceso. Hay que reconocer que lo que está pasando en el PSOE tiene un interés notable para los medios de comunicación. No sñe si tanto para los ciudadanos, pero sí para la prensa. Está en juego el futuro del presidente del gobierno, y también el candidato de uno de los dos grandes partidos a las generales de dentro de año y medio. Todo esto en la precampaña de las elecciones municipales y autonómicas del 22 de mayo. No es de extrañar por tanto que la lucha de poder en el PSOE sea lo más comentado en tertulias y debates.
Hoy, como digo, se celebra el Comité federal del PSOE. ¿Desvelará Zapatero su futuro? Es inútil hacer un pronóstico sobre lo que pasará en esta reunión. Puede que, justo este fin de semana que no estaré cerca del ordenador, haya una noticia bomba que comentar. En ese caso, el lunes escribiría del anuncio hipotético del presidente. Los análisis sobre si sería acertado que Zapatero dijera lo que iba a hacer están a la orden del día. Si no hubiera elecciones en mayo quizás no habría tanto que discutir, pero con esta importante cita electoral en el horizonte, no es fácil establecer si sería bueno para el PSOE que Zapatero anunciara su futuro político. Parece claro que el gran temor entre los candidatos socialistas a estas elecciones es que el desgaste del gobierno por la crisis les pase factura. Zapatero sería, en este cas y según esta lectura, un lastre para su partido. Supongamos que el presidente dice que se va. ¿En qué situación quedaría? Por un lado, de cara a las elecciones autonómicas, puede que los votantes no fueran a las mismas como si se tratara de un plebiscito sobre el presidente, pero la situación de Zapatero al frente del gobierno sería insostenible, o tal parece. Lo que el PSOE no quiere para su partido, dirían desde la oposición, no lo queremos para España.
En esta línea iban los consejos de Emilio Botín a Zapatero en la reunión del presidente con los más destacados empresarios de España en La Moncloa el pasado fin de semana. Por cierto, que González Pons, siempre dando titulares, ha dicho que lo único que le queda de "rojo" al PSOE son los tirantes de Botín. A ver si el PP va a volver a decir que es el partido de los trabajadores. Todo puede ser. En fin, volviendo a lo que le pedía el presidente del Banco Santander a Zapatero, es cierto que la estabilidad no estaría garantizada si el presidente anuncia que se va. La situación en la que se quedaría Zapatero sería la de interinidad. El tiempo que le queda al frente del gobierno estaría marcado por la carrera dentro del PSOE por suceder al presidente, y por los ataques desde la oposición para que se convoquen elecciones. Pero claro, Zapatero tampoco puede alargar su anuncio mucho más tiempo porque el PSOE tiene que elegir un candidato y prepararle de cara a las elecciones generales del 2012. No es fácil la situación que tiene ante sí el presidente, porque no está claro qué sería mejor para su partido. No me refiero a si él debe ser candidato, pues parece que ni sus votantes le quieren como cabeza de lista, sino a cuándo debe anunciar su futuro.
Bono, que está viviendo muy de cerca estas batallas internas por suceder a Zapatero, ha dicho que el presidente es un fijo en la quiniela. Si no fuera porque cuando habla Bono a veces da pie a múltilpes interpretaciones, estas palabras darían a entender que Zapatero va a seguir y que puede incluso repetir como candidato. Es algo que no se plantea casi nadie. A mí me resulta muy improbabe que el presidente decida continuar. Las encuestas dicen que con él el PSOE tiene casi nulas opciones de ganar las elecciones al PP. El descontento con el gobierno es creciente y, para más inri, la mil veces anunciada recuperación económica no termina de llegar. Al presidente le están tocando tiempos difíciles y, en contra de lo que muchos defienden, no todo es culpa de Zapatero. Ahora bien, como presidente del gobierno que es tiene la responsabilidad sobre lo que sucede en nuestro país. Puede que Zapatero no desvele su futuro en este comité, pero la sorpresa mayúscula vendría si el presidente anuncia que se queda y que será el candidato del PSOE a las próximas elecciones generales. Eso es algo que ni siquiera Bono, o eso pienso, ve como una opción real. Zapatero es imprevisible y se puede esperar cualquier cosa de este comité de hoy.
Concluyo esta entrada diciendo que aventurar algo de lo que pueda pasar en el comité del PSOE es muy atrevido. No tengo ninguna información que me invite a pensar que Zapatero vaya a anunciar algo, pero también es verdad que el nerviosismo, no del todo bien disimulado en algunos miembros del PSOE, se acrecentaría en su partido. Los hay que no quieren un anuncio antes del 22 de mayo, pero otros sí desean que el presidente diga lo que va hacer antes de las autonómicas y municipales. La intriga que existe al escribir estas líneas puede que se haya despejado ya cuando se estén leyendo. Sólo sé que no es nada fácil decir si el anuncio vendría bien o no al PSOE. Algo sí haría. abrir de par en par las puertas de la carrera sucesoria. Se daría así el pistoletazo de salida para Chacón. Rubalcaba y quien se apunte. ¿Cómo se elegiría al candidato? ¿Primarias? ¿Comité federal? ¿Dedazo? Veremos.
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