El Periódico de Catalunya publica hoy una encuesta electoral según la cual ERC ganaría las elecciones autonómicas y superaría a CiU por primera vez en la historia. Esto es sólo un sondeo, pero no hace sino mostrar el escenario que intuía casi todo el mundo. No por ello la información de est ediario tiene menos importancia, ni mucho menos, puesto que es la primera vez que una encuesta sitúa a los republicanos por delante del partido que tradicionalmente ha sido siempre el más votado. Es previsible este adelanto de ERC, puesto que CiU lleva un tiempo siendo una copia barata del partido independentista catalán por excelencia. Para votar al aspirante a independentista, al recién llegado, al converso a la causa soberanista, mejor es dar el apoyo al que siempre la ha defendido de manera radical, en el sentido estricto de la palabra. La defensa de la independencia de Cataluña está en el ADN de Esquerra y jamás lo ha estado en el de CiU. Normal que pase lo que está pasando.
El barómetro de GESOP para El Periódico otorga a ERC entre 39 y 40 escaños, es decir, el doble de los 21 diputados en el Parlament con los que cuenta ahora mismo la formación de Oriol Junqueras. CiU seguiría cayendo sin freno. De los 62 diputados que tenía antes de las últimas elecciones pasó a 50 el año pasado y ahora se quedaría, según este sondeo, con entre 34 y 35. El PSC también mantiene su dinámica de caída. Perdería entre tres o cuatro escaños para quedarse con 16-17. ICV mejoraría sus resultados pasando de los 13 parlamentarios actuales a entre 16 y 17. El PP cae hasta los 13-14 (ahora tiene 19), Ciutadans podría igualar a los populares con una proyección de entre 12 y 13 escaños (frente a los 9 del Parlament actual) y la agrupación independentista CUP mantendría sus 3 escaños.
Más de dos tercios del parlamento autonómico serían favorables a la consulta soberanista, según esta encuesta. Los titulares son varios. Por un lado, Artus Mas va camino de convertirse en el mayor líder histórico de ERC. Gracias a él y a su política, CiU no para de hundirse y el partido republicano está en situación de convertirse en la primera fuerza de Cataluña por primera vez en la historia. Cada día que pasa, ERC le debe más al presidente catalán. Todo lo contrario ocurre en su partido. No deben de estar muy satisfechos con estos negros augurios en el seno de CiU, allí donde a nadie se le ocurrió que la deriva soberanista de Mas podría terminar exactamente como refleja esta encuesta. Algo realmente básico, elemental, muy sencillo, pero en lo que nadie cayó.
Cuando alguien radicaliza su postura, cuando se convierte un partido nacionalista pero no abiertamente independentista como CiU en el adalid del soberanismo y cuando se entrega la llave del gobierno a ERC, pasan estas cosas. Realmente era algo previsible, pero no parece que las direcciones de los dos partidos que componen CiU pensaran que algo así podía ocurrir. Igual la pérdida de 12 escaños en las elecciones convocadas por Mas cuando tenía una situación parlamentaria cómoda a mitad de legislatura debería haber encendido alguna alarma. Lejos de eso, CiU buscó el apoyo de ERC para formar gobierno y su acción desde entonces ha tenido un único eje: avanzar hacia el soberanismo.
Un ejemplo de esta senda emprendida por el gobierno autonómico catalán es el simposio "España contra Cataluña: una mirada histórica (1714-2014) que ha convocado la Generalitat. "El objetivo es analizar con criterios históricos, desde el siglo XVIII hasta nuestros días, las consecuencias que ha tenido para el país la acción política, casi siempre de carácter represivo, del Estado español en relación con Cataluña", reza el folleto de este simposio que tendrá lugar los días 12, 13 y 14 de diciembre de este año como acto conmemorativo del tricentenario de la toma de Barcelona por parte de las tropas de Felipe V en 1714. Aquello fue una guerra de sucesión, en absoluto una guerra de secesión. Pero, quien está acostumbrado a pervertir y manipular la historia le coge el gustillo y no hay quien le pare. Al fin y al cabo, toda ideología independentista necesita de algún mito fundacional.
Volviendo al presente, año 2013, el sondeo publicado por El Periódico dibuja un panorama gris para PSC y PP. Los socialistas perderían de tres a cuatro escaños y los populares se dejarían entre 5 y 6. Por su parte, Ciutadants no deja de crecer. Podría incluso igualar al PP en su representación parlamentaria con 13 escaños. La formación liderada por Albert Rivera defiende un discurso claro contra la independencia que ha cuajado en un sector importante de la sociedad catalana. Con todo, como decía arriba, dos tercios de este hipotético Parlament que dejarían unas elecciones a día de hoy sería partidario de la consulta de independencia. Igual, hasta Artus Mas lo celebra, aunque arrastre a CiU al peor resultado de su historia. Cuando se tiene una misión mesiánica que cumplir, el interés partidista y personal queda en un segundo plano.
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